Noticias
Chimenea de ventilación hidrotermal de aguas profundas de la cresta del Atlántico Medio, entorno donde se han descrito muchos nuevos genomas microbianos.
  • No existe una nomenclatura oficial para las especies de microorganismos procariotas que se detectan por técnicas moleculares y nunca se han cultivado en el laboratorio
  • A estos microorganismos se les asignan nombres sin seguir regulación alguna y en ocasiones con multiplicidad, lo que dificulta la comunicación entre científicos.
  • La propuesta facilitaría el camino a seguir para que la comunidad científica pueda conocer, clasificar, identificar y compartir la biodiversidad del mundo microbiano.

Bacterias y arqueas son dos de los tres dominios de la vida en la Tierra que engloban a los organismos unicelulares que carecen de núcleo celular, también conocidos como procariotas. El sistema actual de clasificación de estos organismos sólo acepta que se nombren nuevas especies si al menos un representante de las mismas ha crecido en el laboratorio en forma de cultivo puro (monocultivo), y estos son accesibles para la comunidad científica. Esta es la regla más controvertida del Código Internacional de Nomenclatura de Procariotas (o ICNP) y es un requisito que siempre ha sido problemático para los microbiólogos que estudian procariotas en la naturaleza. El artículo publicado en Nature Microbiology, propone un nuevo código de nomenclatura, que sustituya al actual, que es anárquico y que complica la comunicación dentro de la comunidad científica, facilitando que los investigadores puedan conocer, clasificar, identificar y compartir la biodiversidad del mundo microbiano. 

Reconstrucción a partir de datos de criomicroscopía electrónica de adenovirus humano. Abajo a la izquierda se muestra un detalle de la zona de la cápsida por la cual compiten las proteínas VI y VII.
  • La competición entre una proteína de la cápsida  (VI) y otra que se une al genoma viral (VII) modula la capacidad infectiva del adenovirus humano 5 (HAdV5).
  • Las proteínas de los adenovirus requieren una maduración para permitir al virus salir de los compartimentos de transporte de la célula (endosomas), hasta llegar al núcleo donde se producen millones de nuevas partículas virales.
  • Por primera vez se ha observado el péptido encargado de romper la membrana del endosoma para que el virus pueda progresar con su ciclo infeccioso.

Los adenovirus son patógenos humanos que pueden provocar infecciones de poca relevancia clínica como resfriados, conjuntivitis y gastroenteritis pero que se complican en pacientes inmunosuprimidos. En los últimos años, los adenovirus se han convertido en una valiosa herramienta de la investigación biomédica, y se utilizan como vectores en ensayos de terapia génica, oncólisis y la producción de vacunas. De hecho, varios de los candidatos más avanzados de vacunas contra COVID-19 se basan en el uso de los adenovirus. Sin embargo, aún hay cuestiones básicas de la biología de estos virus que no se conocen en detalle, debido a que los adenovirus están formados por una gran cantidad de proteínas diferentes que tienen que interactuar correctamente para dar lugar a nuevas partículas infecciosas. Tanto para el diseño de antivirales como para su utilización clínica es imprescindible conocer en detalle la biología del adenovirus y su proceso de maduración en la célula para convertirse en virus con alta capacidad infectiva.

Investigadores del CNB-CSIC participan en la coalición internacional Covid19-MS para seguir los tratamientos y efectos del SARS-CoV2 en sangre de pacientes infectados
  • La coalición COVID19-MS cuenta con más de 500 científicos de 18 países que compartirán datos sobre COVID-19 obtenidos mediante técnicas de espectrometría de masas que examinan la sangre en busca de biomarcadores para el mejor tratamiento de los pacientes.

La nueva coalición COVID-19 MS, coordinada desde la Universidad de Manchester, está formada por los principales expertos en espectrometría de masas del mundo. Su objetivo es la puesta en común de los avances que permitan refinar las aproximaciones experimentales y las opciones de tratamiento, determinar los requisitos de aislamiento y acelerar los requisitos de medidas en nuevos programas de desarrollo terapéutico tanto para COVID-19 como en futuras amenazas. El anuncio de la nueva coalición se ha hecho a traves de una carta publicada en la revista The Lancet.

Carlos Martínez Alonso, nuevo integrante del Comité Identificador del Consejo Europeo de Investigación (ERC)

Carlos Martínez Alonso, ex director del CNB, formará parte del Comité internacional de expertos que selecciona a los miembros del Consejo Científico del Consejo Europeo de Investigación (European Research Council).

Martínez Alonso es uno de los seis científicos de alto nivel nombrados la semana pasada por Mariya Gabriel, comisaria europea de Investigación, Innovación, Cultura, Educación y Juventud para integrar el Comité de Identificación que selecciona a los futuros miembros del Consejo Científico del ERC. El Consejo Científico del ERC es el órgano encargado de definir su estrategia y sus metodologías de financiación de la ciencia. Se compone de 22 destacados científicos y académicos que representan a la comunidad científica europea y promueven la investigación innovadora y la creatividad. Su mandato está limitado a cuatro años, renovables una única vez. 

A través de los chats, los estudiantes han conocido en qué se centra su investigación. Alberto Fernández utiliza microscopios para descubrir cómo funcionan y cambian las células infectadas por un virus, y, de esta forma, selecciona nuevos medicamentos antivirales. Entre las numerosas preguntas que ha recibido, destacan: ¿Se puede extinguir un virus?, ¿de qué color es el ADN?, ¿por qué los virus, que no son seres vivos, son tan peligrosos para las personas?, ¿el aire está contaminado por el COVID-19? o, ¿cuál es el virus más peligroso que has estudiado?